


arrojalatierra explora la relación entre el arte y el trabajo en uno de los oficios más táctiles.
Las manos se encuentran con el barro: lo aplastan, lo modelan, transfiriendo el peso y la fuerza del cuerpo a una creación en proceso. No solo manos: también hay pies, piernas y brazos, miembros anónimos de una creación colectiva, de una obra en constante transformación.
arrojalatierra nos guía a través de un proceso común en la cerámica: el machacado, la reducción de las piezas descartadas a polvo, la hidratación y su reutilización. Con un glosario poético de imágenes, la película vincula la artesanía con la naturaleza y sus ciclos. Lo que se pudre, lo que se destruye, también puede transformarse.
Si el corazón es el músculo que nunca descansa, las manos no son mejores: son las trabajadoras del cuerpo. El material está presente tanto delante de la cámara como dentro de ella. Ante nosotros, las cerámicas se mezclan, se moldean y se esculpen colectivamente. Dentro, la celuloide captura la luz del mundo que la rodea, registrando el gesto, la textura y la memoria del material en constante cambio.



arrojalatierra explora la relación entre el arte y el trabajo en uno de los oficios más táctiles.
Las manos se encuentran con el barro: lo aplastan, lo modelan, transfiriendo el peso y la fuerza del cuerpo a una creación en proceso. No solo manos: también hay pies, piernas y brazos, miembros anónimos de una creación colectiva, de una obra en constante transformación.
arrojalatierra nos guía a través de un proceso común en la cerámica: el machacado, la reducción de las piezas descartadas a polvo, la hidratación y su reutilización. Con un glosario poético de imágenes, la película vincula la artesanía con la naturaleza y sus ciclos. Lo que se pudre, lo que se destruye, también puede transformarse.
Si el corazón es el músculo que nunca descansa, las manos no son mejores: son las trabajadoras del cuerpo. El material está presente tanto delante de la cámara como dentro de ella. Ante nosotros, las cerámicas se mezclan, se moldean y se esculpen colectivamente. Dentro, la celuloide captura la luz del mundo que la rodea, registrando el gesto, la textura y la memoria del material en constante cambio.
c/Lluís el Piadós, 3
08003, Barcelona
Lunes a viernes 11:00–14:00 | 16:00–20:00
Sábados 11:00–14:00
c/Lluís el Piadós, 3
08003, Barcelona
Martes a viernes. 11:00–19:00 h
Sábados. 11:00–14:00 h